miércoles, 2 de diciembre de 2009

María, ejemplo de paz

A continuació vos deixe la redacció de Carlos per la Concurs de la Puríssima. Va ser triada pel Departament de Lletres del col·le per a representar-nos en la nostra categoria. No va guanyar... així de bones serien les altres!

Considere que és un exemple d'esforç literari, d'imaginació, d'innovació. Gràcies per compartir-la amb nosaltres.


"Había una vez un rosa, muy bella y hermosa.
Había también un guerrero, Pablo, el hijo del herrero.
Pablo y su ira querían destrozar la rosa, tan bella y hermosa,
pero María, ejemplo de paz, le detiene,
pues mucho amor a la vida le tiene.

"Pablo, Pablo, yo a ti te hablo.
No mates a la rosa, tan bella y hermosa"

Y la Virgen de la paz con su valentía tenaz,
la ayuda a levantarse del suelo,
y le ofrece todo su consuelo.

Pablo muy enfadado, pues se siente condenado,
cuando debería sentirse amado,
se vuelve a llenar de ira y le da guerra a Ontinyent,
y con sus armas le demuestra que le es infiel.

María, pura Virgen de la paz, le detiene,
porque a Ontinyent y a su gente amor les tiene...

"Pablo, Pablo, yo a ti te hablo,
no lo pagues con Ontinyent"

Y el pobre Pablo nada bien se lo toma,
no entiende el amor de María, se siente humillado.
Entonces lo paga con una paloma blanca,
y la mete en una zanja.

"La paloma está sufriendo"
Le dice María insistiendo.
"Pablo, Pablo, una vez más te hablo.
No lo pagues con la blanca paloma.
¿No ves cómo su alma pura ante nosotros asoma?

Pablo, el guerrero, el hijo del herrero,
mira la paloma blanca que sigue metida en la zanja.
Nota la fuerza y la insistencia de María,
y entristecido suelta a la paloma,
su corazón se ha enternecido.

¡Madre, Madre, por fin te he comprendido!
No te separes de mi camino.

Y Pablo, el hijo del herrero, deja de ser guerrero,
la paz insistente de María,
le ha dado un gran cambio a su vida"

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